Niego la mayor, la existencia de pueblos elegidos o superiores y por tanto, de pueblos inferiores rechazo la superioridad del pueblo judío sobre los pueblos gentiles o cualesquiera otros pueblos y condeno el sionismo como ideología racista encubierta por las autoridades pseudo democráticas.
Suele creerse que los alemanes mataron a los judíos, por lo general, en cámaras de gas, y que sin éstas, los medios modernos de transporte y una burocracia eficaz, los alemanes no habrían podido matar a millones de judíos. Persiste la creencia de que, de alguna manera, sólo la tecnología posibilitó un horror a semejante escala.
Existe la creencia generalizada de que las cámaras de gas, debido a su eficacia, fueron un instrumento necesario para la carnicería genocida, y que los alemanes decidieron construir cámaras de gas en primer lugar porque necesitaban unos medios más eficaces para matar judíos.
Todos estos criterios, que configuran básicamente la comprensión del Holocausto, se han sostenido sin discusión, como si fuesen verdades evidentes por sí mismas. Han sido prácticamente artículos de fe, procedentes de fuentes distintas de la investigación histórica, han sustituido el conocimiento fidedigno y han distorsionado el modo de entender este período.
No hay comentarios:
Publicar un comentario