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Esto que vas a leer en este blog son algunos "detalles" que tus profesores de historia no creyeron que fuera necesario contarte.

sábado, 13 de mayo de 2017

Reconstruyendo la Verdad



El fraude para certificar los supuestos restos del Führer y su esposa..pero los alemanes 
se adelantaron engañando a Stalin y su camarilla de psicópatas

Elena Moiseevna Rzhevskaya, agente e intérprete judía rusa de la agencia de contra-Inteligencia soviética SMERSH, formó parte del reducido grupo de soviéticos que trabajó en la identificación de los imaginarios restos de Hitler.

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Elena Moiseevna Rzhevskaya

Habiendo muchas razones para no creer en la patraña del búnker, nos vamos a centrar en detalles "olvidados" que nadie les da importancia ! los dientes !..al identificar ciertos fragmentos maxilares y un puente dental como pertenecientes respectivamente a Adolf Hitler y a Eva Braun, los dentistas alemanes habrían estado perpetrando un fraude para engañar a Stalin y su camarilla de psicópatas.



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Dr. Hugo Johannes Blaschke dentista de Hitler


Aunque "los buenos" tenían al profesor Blaschke en sus manos desde Mayo de 1945, cuando él fue capturado, hasta finales de 1948, ellos nunca hicieron pública nada de la información que él compartió con ellos sobre los dientes de Hitler.

Cuando en Julio de 1945 el profesor Blaschke apareció en un campo estadounidense para prisioneros de guerra. Ellos prontamente le enviaron un bolso que contenía todo el equipo necesario y ordenaron que él reconstruyera, tan perfectamente como su memoria se lo permitiera, el aspecto del maxilar de Hitler. El resultado, se nos dice, calzaba perfectamente con el maxilar identificado como de Hitler. 







El 5 de Febrero de 1946, por ejemplo, él fue interrogado por la Inteligencia militar estadounidense precisamente sobre ese asunto. Sin embargo, el informe basado en la entrevista de 1946 nunca fue publicado y permanece clasificado por el ministerio de Defensa estadounidense hasta hoy. Considerando que hacia 1946 los estadounidenses estaban muy ansiosos por publicar cualquier información que sugiriera que los soviéticos realmente habían descubierto el cadáver de Hitler, debe tenerse presente la circunstancia de que, a sabiendas o no, el profesor Blaschke les había dado una información que contradecía esa posición.



Es también difícil sacar cualquier conclusión firme de una entrevista que el profesor Blaschke dio acerca del asunto de los dientes de Hitler mientras todavía estaba en cautiverio bajo los estadounidenses a principios de 1948. Aunque en esa ocasión el profesor Blaschke expresó su confianza en que los soviéticosrealmente tenían el maxilar de Hitler, él hizo dos comentarios que sólo debilitaron esa opinión.

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Restos de la  imaginaria mandíbula de Hitler


Blaschke desafió a los soviéticos a que le mostraran la mandíbula en cuestión: 

¿Por qué no me muestran los rusos esa mandíbula? Sólo necesito darle una mirada y puedo declarar definitivamente si es o no la mandíbula de Hitler. 
Oakland Tribune, 6 de Mayo de 1948. 

La única respuesta obvia a esa pregunta es que los soviéticos sabían que no se trataba realmente de la de Hitler.

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Blaschke puede incluso haber sido castigado por esas indiscreciones. Hacia fines de 1948, justo cuando los estadounidenses estaban a punto de liberarlo, el profesor Blaschke fue juzgado por un tribunal de "des-nazificación" alemán y condenado a tres años adicionales en prisión. Sospechosamente parecía que él estaba siendo castigado por haber sido el dentista de Hitler.




Blaschke fue liberado de prisión y practicó la odontología en Núremberg hasta que falleció en 1959. Él nunca dijo nada posteriormente sobre los dientes de Hitler. Su silencio con respecto al asunto parece casi inexplicable. La información derivada del profesor Blaschke está también claramente ausente. En esas circunstancias parece altamente probable que la evidencia del profesor Blaschke sólo había confirmado lo que los soviéticos ya habían sospechado: que ellos habían sido llevados a creer otra cosa.

Fuente: nexusmagazine.com 

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